¿Por Qué Sangran las Encías?
El sangrado de encías suele ser un síntoma de gingivitis, la etapa inicial de la enfermedad periodontal. La principal causa de la gingivitis es la acumulación de placa bacteriana en la línea de las encías. Esta placa se forma cuando los restos de alimentos y las bacterias no se eliminan adecuadamente mediante el cepillado y el uso de hilo dental.
Cepillado Deficiente: Un Error Común
Muchas personas creen que con solo cepillarse los dientes dos veces al día están haciendo lo necesario para mantener una buena salud bucal. Sin embargo, un cepillado deficiente puede ser igual de perjudicial que no cepillarse en absoluto. Aquí hay algunos errores comunes:
- Cepillado Incompleto: No cepillar todas las superficies de los dientes, especialmente las áreas cercanas a las encías. Otro error común es que al ver que sangran las encías, dejan de cepillarlas, y hay que hacer todo lo contrario, seguir cepillando ya que el sangrado nos advierte de que hay placa acumulada.
- Técnica Incorrecta: Usar movimientos horizontales en lugar de pequeños círculos o movimientos hacia arriba y hacia abajo.
- Duración Insuficiente: Cepillarse por menos de dos minutos.
- Falta de Regularidad: No cepillarse con la frecuencia recomendada, el cepillado mas importante es el de la noche.
Consecuencias de un Cepillado Deficiente
Cuando no se cepillan los dientes de manera adecuada, la placa bacteriana se acumula y eventualmente se endurece formando sarro, lo cual solo puede ser eliminado por un profesional dental. La acumulación de placa y sarro irrita las encías, causando inflamación y sangrado.
Consulta Regularmente a tu Dentista
Además de mejorar tu técnica de cepillado, es crucial visitar a tu dentista regularmente. Las limpiezas profesionales eliminan la placa y el sarro acumulados, y permiten detectar problemas a tiempo. Si experimentas sangrado de encías persistente, consulta a tu dentista lo antes posible.
Un cepillado deficiente puede tener consecuencias graves para tus encías y tu salud bucal en general. Mejorar tu técnica de cepillado y mantener una rutina de higiene bucal adecuada son pasos esenciales para prevenir el sangrado de encías y disfrutar de una sonrisa saludable. No ignores las señales de tu cuerpo y dale a tus encías el cuidado que merecen.
